El frío y el temporal, volvió con fuerza y parece que el fin de semana se presenta casero,
de modo que cuando tras los cristales vemos azotar los árboles, llover a mares y estamos calentitos en casa, ¿no apetece hacer galletas? jajaja.
Bueno, pues a mí me sucede ésto y seguro que este finde,
alguna nueva receta será horneada en mi cocina.
Entre tanto, aquí dejo ésta de un libro que tengo desde hace años
de las Hnas. Clarisas (Repostería Monacal), del cual ya hice un montón de recetas,
y son siempre deliciosas, pues todo lo que viene de las manos de las monjas, suele ser éxito seguro:
ingredientes sencillos, elaboraciones tradicionales y nada complicadas,
y sabores... exquisitos.
Ingredientes
- 200 g. de nata
- 200 g. de azúcar
- 2 yemas de huevo
- ralladura y zumo de 1 limón
- 1/2 cucharita de bicarbonato
- Harina, la que admita
Preparación
- Batir bien la nata con el azúcar y añadir las dos yemas de huevo y el bicarbonato.
- Batir de nuevo hasta que todos los ingredientes queden bien integrados.
- Añadir la harina necesaria, hasta lograr una masa suave y elástica.
- Extender la masa sobre la mesa de trabajo, ayudándose de un rodillo, hasta que quede como de 1 cm. de espesor.
- Cortar las galletas con un cortapastas y colocarlas en la bandeja del horno, sobre un papel vegetal.
- Pintar con clara de huevo batida y meter en horno precalentado a 170º unos 15 minutos, o hasta que se vea que ya están doraditas.
- Sacar sobre una rejilla. Dejar enfriar y espolvorear con azúcar glas.