Menú de caza y trufa, un menú degustación a 4 manos.
El Menu de caza y trufa irremediablemente es algo que relaciono con el invierno. He dicho una obviedad, pero no hay que dar nunca nada por sabido. Son dos ingredientes que siendo tan clásicos, no son fáciles de encontrar. La trufa si, está en pleno apogeo y es recibida con los brazos abiertos, pero ¿la caza?. No se si porque no está de moda, porque es muy laboriosa o porqué razón no es fácil encontrar platos con ella. Mucho más difícil es encontar un menú.
Pero durante prácticamente un mes Hotel Gallery ofrece un menú dedicado a estos dos productos. Pablo Tomás, Chef de El Café del Gallery y Joel Castanyé de la Boscana (premiado con una Estrella Michelín en la última edición) son los artífices de este fantástico menú.
Otros años el Hotel Gallery ya había dedicado alguna jornada a estos ingredientes. Una forma de diferenciarse que, dado que vuelven a ofrecerlo, tiene buena acogida. Este año, además de repetir el menú lo hacen con la incorporación del Chef de Lleida, logrando un 4 manos redondo.
En este Menú de caza y trufa nos reencontramos con la cocina más tradicional y una de las más sanas. Curiosamente con la corriente healthy food que nos invade, es extraña la ausencia de estas carnes. Son bajas en grasas y sabrosas. Carnes duras que necesitan un buen conocimiento y una buena técnica para lograr su punto exacto a la hora de degustarlas. Reducciones, salsas y frutas suelen ser las mejores aliadas para ellas. Y como no, la trufa.
La combinación es como traer el bosque más profundo a la mesa. Sabores térreos e intensos se disfrutan de principio a fin. Un menú que empieza con unos originales aperitivos con trufa negra: Cacahuete y trufa negra y Capuccino de pularda trufada. Un interesante inicio que presagia una comida más que interesante. A resaltar que, al probar el capuccino me asaltó un recuerdo de la infancia. Ese sabor a papilla, a la hecha en casa, nada de "potitos" envasados. Hacía tiempo que no tomaba una crema con sabor a carne.
El entrante fue un Carpaccio de pichón con foie, praliné y helado de piñones. Una buena transición que continúa con la línea ascendente del menú hacia los principales: El canelón de Mamá Roser, Bacalao a la perigourdine y Liebre a la Royal, manzana al calvados y remolacha. Ninguno de los tres queda excluído. Incluso el bacalao, que a priori parece desentonar, tiene su momento para aportar un sabor diferente.
El postre no podía ser algo azaroso. Quiero pensar que realmente pensaron en como acabar con una comida rotunda aportando originalidad, que fuera sabroso pero que además dejara un recuerdo redondo. Quiero pensar que fue algo totalmente voluntario que la sopa de citronella, lima, limón y clavo naciera para la ocasión, porque remató con una frescura una comida que no admitía otra cosa.
El maridaje de este menú fue Cava Castellrogi Brut Nature Gran Reserva para los aperitivos, Blanc de Gressa 2013 para el entrante y Cérvoles Garnacha 2015 para los principales. Vale mucho la pena probarlo por el alto nivel de sus platos, por su originalidad y por su apuesta por estos dos productos que hacen de este menú una oferta poco habitual. Si sumamos además el servicio, el entorno, el Hotel Gallery y su precio, 60 Euros con IVA incluído es una apuesta segura.