La decoración ideada para mi hermana en nuestra chimenea, que le da un toque navideño especial al living de nuestra casa. Mucho rojo y dorado, contrastando con el árbol :)
El nuevo adorno que compré para nuestro árbol, como es costumbre de todos los años (1 por año). Un divertido Papá Noel, que resalta entre tanto plateado y blanco.
Las ciruelas que mi padre trajo de nuestro campo y están exquisitas. Y ni hablar de las nueces, aunque no llegué a fotografiarlas ya que desaparecieron por arte de magia familiar jeje.
Y por último, lo más importante: el viejo y querido pesebre familiar, tiene unos 50 años y sus piezas necesitan una remodelación pero les juro que para mi no hay otro como ese. Detalle (por si no lo sabían) el Niño Jesús recién se pone en el pesebre el 24 a la medianoche. Un lindo gesto que hacerlo en familia y que el más pequeñito de la casa sea el encargado de colocarlo allí.