Parfait De Plátano Con Anís Estrellado

Con esta receta participo en el Reto de Agosto de Cocineros del Mundo de Google+ en el apartado dulce
El parfait es una denominación francesa (cómo no, los franceses siempre descubriendo nuevas preparaciones y a la vanguardia en lo que a gastronomía se refiere) que significa "perfecto" y alude a un postre helado, generalmente realizado con frutas.
En mi casa los plátanos se consumen en cantidades industriales. Es cierto que es la fruta más valorada por los niños, pues se pela y come fácilmente, sin mancharse las manos y tiene una textura suave y un sabor dulce muy agradable.
Al ver el reto de este mes se me ocurrieron muchas cosas, pero ya tenía algunas publicadas y una de las bases del concurso es que fueran inéditas en el blog.
Esta receta es muy sencilla y permite sacar partido a los plátanos que se nos ponen feos. Si no disponéis de anís estrellado no hay problema, se puede sustituir por media copita de anís, haciendo que hierva mientras se infusiona para eliminar el alcohol.

Para 8 moldes o flaneritas:

• 4 yemas de huevo
• 15 g de azúcar
• 125 mL de leche
• 4 plátanos
• 250 mL de nata para montar
• 2 anises estrellados
• 1 cucharada de vainilla líquida
• sirope de chocolate o de caramelo para decorar
• fresas o frambuesas para decorar

Se ponen en un bol las yemas con el azúcar y se baten, a mano o con varillas eléctricas, hasta que doblen su volumen. Se incorpora la cucharada de vainilla líquida y se sigue batiendo.
Se calienta la leche en un cazo con los anises estrellados y un poco de vainilla en polvo (opcional). Cuando esté la leche caliente y haya infusionado un poco el anís, se retiran éstos y se va agregando la crema de azúcar y yemas, con el fuego bajo y removiendo sin parar con la cuchara de palo hasta que empiece a hervir y se quede una consistencia de crema. Sería como las natillas o la crema pastelera, que en cuanto empieza a hervir espesa.
Se pelan los plátanos, se les quitan las hebras y se trocean. Se disponen en el vaso de la batidora y se baten hasta que quede una papilla.
Se añade la crema de yemas que hemos acabado de preparar y se bate de nuevo, hasta que quede homogénea. Se deja enfriar y se introduce en la nevera durante media hora.
Se bate la nata (sin azúcar) hasta que quede semimontada y se añade a la crema de plátano, poco a poco y removiendo sin parar.
Se vierte la preparación en unos moldes de silicona o de metal, tipo flanerita y se deja en el congelador unas 3 horas.
Para desmoldar, se sacan los moldes del congelador y se dejan unos minutos a temperatura ambiente (no mucho en verano).
Se emplatan acompañando de sirope o de una crema de chocolate caliente, unas rodajas de plátano y frutos rojos.