Como os contábamos en nuestro anterior post, tras la visita a la tranquilidad en las cavas Recaredo, tuvimos la ocasión de probar algunos de sus cavas y vinos:
Aloers 2013: 100% Xarel.lo, certificado Demeter de agricultura biodinámica. El Xarel.lo, una variedad mediterránea, es el leit motiv de Celler Credo, el proyecto de vinos de Recaredo. Vendimiado a mano, y procedente de suelos calcáreos, es un vino muy vivo, que tiene todavía un gran recorrido en botella. Macera con el raspón durante algunas horas, y durante dos meses, aproximadamente, se cría con las lías. Con una graduación de 12%, mantiene una acidez muy fresca y natural, y aporta aromas de fruta blanca, y un toque mineral, con un buen paso por boca, y una agradable persistencia. Aloers se ha convertido en el vino bandera del Celler Credo en defensa de la variedad xarel.lo. Con un precio de alrededor de 12 euros, su relación calidad-precio es excelente.
Intens 2010 Rosat Brut Nature Gran Reserva: 58% Pinot Noir, 42% Monastrell, ha pasado 36 meses hasta el degüelle, en contacto con sus lías. Primer cava rosado del mundo exclusivamente biodinámico. Un cava con estilo y personalidad, con un paso por boca seco y goloso, recuerdos a frutas rojas del bosque, una burbuja muy fina y elegante. Un cava muy adictivo, a todos los presentes nos encantó, y nos trajimos algunas botellas para seguir desentrañando sus secretos en casa. Durante unos 2 meses, parte del vino pasó por barrica de roble, para aportarle un punto de estructura. Su precio, 18 euros, puede asustar un poco, pero de verdad que merece la pena.
Brut de Brut Brut Nature Gran Reserva 2005: 55% Xarel.lo, 45% Macabeu, 93 meses hasta el degüelle, para el, con permiso del Turó d’en Mota, mejor cava de Recaredo. Un cava sobrio y elegante, nacido de las viñas más viejas, en suelo calcáreo. Frutas confitadas, aromas a panadería, un toque cítrico, un color y una burbuja espectaculares. Su precio? alrededor de 27 euros, desde luego no es un cava de diario, pero sí un placer para disfrutar en un gran momento.
Toda la visita estuvimos acompañados por Claudia, responsable de exportación, gracias a nuestro amigo Pedro. Además tuvimos la ocasión de conocer al gran Ton Mata, que nos explicó la filosofía detrás de los vinos de Can Credo, las diferencias entre uno y otro, la exclusividad de algunas añadas, que es posible que no se vuelvan a repetir. También nos enseñó su nuevo experimento, el Ratpenat 2013, 100% Macabeu, recién salido al mercado, del que destinan el 60% de los beneficios a un proyecto para reintroducir los murciélagos (ratpenat, en catalán) en las viñas como parte del equilibrio de las mismas.
Ratpenat 2013, el nuevo proyecto de Celler Credo
Un placer la visita, un placer ver cómo la familia Mata entiende que la tierra devuelve lo que recibe, y que la única manera de obtener un gran fruto es cuidándola sin agresiones, sin exigirle demasiado (obtienen unos rendimientos por hectárea de unos 7.000 kg, cuando la DO autoriza 12 y 13.000). El resultado, por ahora, y van 90 años, demuestra lo acertado de su planteamiento.