Si los dulces y los refrescos forman parte de tu alimentación diaria o no puedes perdonar EL postrecito después de la comida, puede que tengas un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 de acuerdo a un estudio que se publicó recientemente.
Este es el primero de una serie de posts dedicados al azúcar, -para quitarle la carita de “yo no fui”-.
- ¿Quién hizo y pagó el estudio?
Nada más y nada menos que: Universidad de Stanford, Berkeley y San Francisco y financiado con sus recursos.
¿Por qué es importante saber quién paga? No es sólo por metiches o indiscretos: imagina que lo paga Johnson & Johnson, el papá de Splenda … ya no sería tan “inocente y desinteresado” el resultado, ¿o no?
- ¿De qué se trata?
Resulta que comprueban que el consumo de azúcar es un factor de riesgo para desarrollar diabetes tipo 2, independiente del peso corporal y de otros factores.
El estudio consideró la información de la última década de 175 países y llego a la conclusión de que:
Si consumes demasiada azúcar, tu riesgo aumenta sin importar si estás en tu “peso ideal” o no, independiente del nivel socioeconómico, sedentarismo, tabaquismo, edad o consumo de alcohol.
- Más azúcar = más riesgo
Esta vez, la ecuación es muy sencilla: más azúcar, más riesgo de desarrollar diabetes.
Pero no es simplemente que tomes café con 4 cucharadas de azúcar o 600 ml de refresco regular, también cuentan los azúcares que le añaden a los alimentos procesados (cereales, barritas, pan de caja, comidas congeladas, embutidos, dips, salsas … ) y que tienen apodos tan variados y creativos que no sabes que los tienen. En pocas palabras:
Que no sepa dulce, no quiere decir que no tenga azúcar.
- ¿Azúcar o fructosa?
El estudio considera todos los azúcares como un genérico y no se refiere a alguno en específico.
Tampoco considera cómo te estás comiendo esos azúcares: puede ser un refresco, una “jugo-agüita” saborizada o alimentos procesados.
O sea que el azúcar mascabado ultra orgánico, el jarabe de savia, agave y maple, la miel de abeja, el azúcar refinado o el jarabe de maíz de alta fructosa (alias fructosa) de los refrescos, son lo mismo y no hay que abusar sólo porque tienen nombres glamorosos o porque son 100% naturales.
Si te interesa leer el artículo completito lo encuentras acá .
Reflexión:
Existe un principio básico en Toxicología de Alimentos y dice que:
Es la dosis (cantidad) lo que hace que algo sea o no un veneno.
- Paracelso
En mi opinión no se trata de prohibir alimentos, tampoco se trata de alimentos “no saludables” y “saludables”; sino que la moderación – hija de la prudencia y del sentido común-, esta en nuestros hábitos. ¿Tú qué opinas?
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Fuente imágenes:
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