Este mes os tengo un poco abandonados en el blog pero las circunstancias mandan y es que, por fin, estamos de mudanza en nuestra casa así que no tengo mucho tiempo para cocinar cosas nuevas. Pero hoy es tercer domingo del mes y no podía faltar a mi cita con el reto Cocinas del Mundo Navideñas y cuya anfitriona es La cajita de nieveselena.
Este mes el reto no se va de visita a un país concreto sino que la propuesta es darnos un paseo por el mundo con recetas navideñas. Tengo que confesar que mi idea original había sido preparar algo muy típico de la navidad holandesa pero me ha sido completamente imposible. Y es que, cuando me disponía a cocinarlo, con todos los ingredientes ya listos, decidió visitarme un pequeño virus que me tuvo con una gastroenteritis durante dos días...¡Ni oler la comida pude!
Pero como no quería perderme el reto he tenido que tirar del "fondo de armario" y he rescatado una receta que tenía desde hace siglos y que nunca había publicado. La receta es de nuestra vecina Italia (si, lo se, tengo fijación) y es un perfecto entrante para estas fiestas navideñas. Para los que no conozcáis la bresaola os diré que es un embutido típico de Lombardia a base de carne de ternera salada y curada durante 2-3 meses y que se consume cruda, lo que la hace ideal para preparar un carpaccio. ¡Riquísima!
Ingredientes: 200 g bresaola; rúcola; queso parmesano; aceite.
Preparación: Colocar en el plato donde vayamos a servir la bresaola en finas lonchas cubriendo todo el fondo. Añadir por encima la rúcula y el queso parmesano (rallado en tiras o en escamas) y regar con un buen aceite de oliva. Yo no suelo añadir sal ya que la bresaola ya tiene un punto salado. Servir acompañado de un buen vino.
Con esta receta participo en el reto Cocinas del Mundo Navideñas y aprovecho para desearos unas muy felices fiestas y que se cumplan todos vuestros sueños.