Esta semana os traemos una receta un tanto exótica, muy popular en Ámerica Latina y cada vez más habitual de encontrar en la carta de muchos restaurantes españoles. En "Tó está bueno" nos encanta probar platos de todas partes del mundo y cocinarlos en casa aún más, es genial salir un poco de la rutina y manejar ingredientes diferentes a los corrientes (algunos de ellos pueden ser difíciles de encontrar, pero en muchas ciudades hay supermercados y tiendas especializadas en productos latinos).
Esta receta es de origen peruano y va a ser la primera de una serie de recetas que vamos a ir publicando próximamente. Sara realizó hace un tiempo un trabajo en torno a platos Nikkei, que para quién no lo sepa es una fusión entre la gastronomía peruana y la japonesa (aunque también se les llama Nikkei a los emigrantes de origen japonés y a su descendencia), así que prepararos para mucho pescado crudo, maíz y ingredientes muy picantes.Ingredientes (para 4 personas)-500 g de salmón-el jugo de 3 limas-300 ml de caldo de pescado-un diente de ajo pequeño-una cayena (o media, según vuestra tolerancia al picante)-un trozo de unos 5 cm de rama de apio-1/2 cebolla roja picada-1 aguacate maduro-maíz (hemos usado un maíz gigante típico de Perú, que compramos en una tienda especializada en productos latinos que hay por la Macarena, pero podéis usar el normal que se encuentra en todas las tiendas)-75 ml de leche evaporada-cilantro picado-ajonjolí al gusto-sal y pimienta1-Triturar el apio, el ajo y la cayena junto con el caldo de pescado, el jugo de las limas y la leche evaporada. Pasar por un colador. Refrigerar2-Cortar el pescado en dados o en láminas gruesas, salpimentar, añadir el cilantro, el ajonjolí , el aguacate, el maíz y la cebolla picada y cubrir con el caldo que hemos obtenido en el paso anterior. Tapar y dejar macerar en la nevera unos 15 min. El pescado no debe estar en el aliño durante demasiado tiempo pues se cocinará demasiado y quedará muy ácido.La receta es muy fácil y sirve para cualquier pescado que queramos preparar. Podemos variar el punto de picante, o darle un toque más andaluz haciendo un picadillo de verduras para acompañar. Esta es una receta básica que podéis adaptar y enriquecer como queráis.