Hola a todos, en el siguiente post os cuento mi experiencia de comer en Mandala, Oliva.
Detrás de este peculiar restaurante, está el jefe de cocina Álex Marí junto a Reme Canet. Juntos dirigen el restaurante Les Dos Llunes y a finales del 2017 abrieron Mandala, los dos situados en Oliva.
Mandala está situada a escasos metros del mar, en una casa rehabilitada de principios del siglo XX y decorada con un estilo étnico.
Cuenta con un amplio horario de cocina de 09:00 a 00:00, con una carta de desayunos como la que veis en la foto. Y una carta para comer o cenar muy variada desde pizzas, pasta fresca, pescados y carnes.
Cuando fuimos estaba todo ocupado, nos apuntaron en la lista y mientras pasamos a la terraza a tomar algo. Eran casi las dos y aunque a media mañana los niños habían tomado fruta tenían hambre, pensé en pedir unas papas pero en terraza servían únicamente estos aperitivos que veis en la siguiente foto.
Los niños no comen frutos secos, los altramuces apenas quisieron probarlos así que tuvieron que picar esas patatitas pequeñitas, un poco tristes en mi opinión. Un picoteo pensado para los adultos.
Precio de la caña 2,50 € y el aperitivo 2 €.
Tienen un menú infantil que me gustó mucho, spaghetti con tomate natural o animalitos de pasta biológica rellenos de queso con salsa de tomate natural. Nosotros pedimos un plato de animalitos para compartir entre los dos niños.
El buenpadre y yo pedimos la Ensalada La Bomba, un pan crujiente relleno de tomate del terreno con salazón y olivada 9 €. Un plato original, con tomate que sabía a tomate de verdad, estaba muy rico y la combinación de tomate-salazón-olivada queda muy sabrosa.
El siguiente plato que pedimos fue la Pizza Rúcula, con tomate, mozzarella, rúcula, grana padano y jamón serrano 9€. Una deliciosa pizza de masa casera hecha en horno de leña, estaba muy rica.
Como veis en la foto tienen una gran variedad de tartas artesanas. No sé si suelen elaborar las mismas siempre o varían.
En la vitrina había tarta Oreo, tarta de nueces pecán con helado, de galletas y chocolate, cheese cake, tarta de manzana con helado de vainilla, tarta de Santiago, de fresas y chocolate blanco, de nutella y carrot cake.
Nosotros pedimos Tiramisú casero 5 € (foto) y Coulant de chocolate 4 € para los niños. Siento no poder compartir foto del Coulant pero puedo deciros que a los niños les gustó mucho.
En la carta de postres además de tartas ofrecen fruta natural de temporada.
El precio ni barato ni caro, creo que como en la mayoría de restaurantes a pie de playa. El trato de los camareros correcto, y todos los platos que pedimos me parecieron ricos.