Ensaladilla de pimientos asados

Esta ensaladilla es de mis preferidas, es una de esas recetas de las de toda la vida, una comida de todos los días y también muy típica en los "chiringuitos". Aquí en Málaga, la costa está llena de restaurantes de playa que aquí llamamos chiringuitos, pescaíto frito o a la brasa y ensaladilla de pimientos que no falta en ninguna carta.

Además también es de esas recetas con las que de pequeña ya estaba metida en la cocina. Siempre me ha gustado cocinar, y mi madre ni corta ni perezosa me dejaba las labores que más tiempo le quitaban, y gracias a eso crecí haciendo lo que más me gusta. Así que la labor de pelar pimientos asados era para mí, ¡mi madre asaba cantidades industriales de pimientos!

Lo mejor es que es una receta sencilla, saludable y llena de nutrientes de los pimientos rojos y del aceite de oliva virgen. Que no falte una buena barra de pan.
Las cantidades son aproximadas, realmente puedes hacer cuanto quieras. En casa como somos poquitos, hago ensaladilla para un par de días. Se puede añadir algunos dientes de ajo en la bandeja de horno, mi madre lo hacia, pero yo la prefiero sin ellos, más suave.

• Pimientos rojos de asar (grandes y de piel gruesa, así se le puede sacar la carne, no valen los finitos y chiquitines)
• Cebolla (para estos 4 pimientos, con una pequeña o media grande es más que suficiente)
• Aceite de Oliva Virgen
• Vinagre
• Sal

1. Lava los pimientos y colócalos en la bandeja del horno o una fuente refractaria. No hace falta picharlos.
2. Asalos a 200º durante veinte o treinta minutos (dependerá del tamaño de los pimientos), que veas que ya están cocinados y blanditos. Las fotos te pueden ayudar a saber cuando están cocinados.


3. Déjalos enfríar, ya verás que fácil sale la piel. Con tirar un pelin, sale de maravilla. Pélalos y cortalos en tiras.

4. Corta la cebolla en juliana muy finita, es decir, en tiras como se ve en la foto. A mi me gusta cortarla muy muy fina, casi transparente. Asi no resulta fuerte al comer, y una vez aliñada con el aceite y vinagre se mezcla perfectamente con los pimientos.


5. Mezcla los pimientos con la cebolla, y aliña generosamente con aceite de oliva virgen, vinagre y un pellizco de sal.
Ahora vete a buscar la barra de pan y ya sabes, no dejes ni las migas!!

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