¡Por fin! Las deseadas vacaciones a la vuelta de la esquina. La cámara preparada, las maletas abiertas y a medio hacer, así voy dejando los que-no-se-me-olvide y es que ya, ni hago lista de lo que tengo que llevar, el caluroso julio me ha vuelto más desordenada, que no desorganizada, no es lo mismo. Y en casa se ha instaurado la ley del mínimo esfuerzo. Cuento los días y las horas que faltan para cerrar las maletas y paso el rato leyendo o volviendo a ver las fotos de otros viajes, de otras escapadas. Sí, estoy en #MODOVIAJE_ON y es imposible sacarme de ahí. Solamente la idea de preparar este Helado de Crema de Speculoos, me ha apartado un poco de albumes y guías, pero ha durado poco.
Revivir antiguas experiencias de viajes, revisar las fotos, buscar excursiones, restaurantes y qué hacer en el tiempo libre, todavía me resulta mucho más agradable en compañía de este Helado de Crema de Speculoos.
La Crema de Speculoos es un descubrimiento que hice hace algunos en Francia. Afortunadamente, en España no he encontrado donde la venden. No me he equivocado, digo afortunadamente por que para mí es adictiva y sería mi perdición. La mejor definición que encuentro de esta crema es la que hizo mi sobrino cuando se la di a probar por primera vez: "¡Es como el sabor a galleta pero concentrado!" Ni más, ni menos, eso es. Si os gustan las clásicas galletas Speculoos, esas sí se encuentran en España, sabréis a que me estoy refiriendo.
Para los que no sepáis de qué estoy hablando, os remito a mi publicación Natillas a la Vainilla con Speculoos dos Texturas, ahí encontraréis imágenes de esta crema.
En otras ocasiones ya os lo he contado pero la forma de abastecerme de esta crema es trayéndomela como souvenir cuando viajo a Francia o a Bélgica. En Andorra también la podéis encontrar, de hecho, tengo una amiga que va con frecuencia y siempre se acuerda de traerme ... ¡qué peligro! ¡Ah! Y también la podéis conseguir por Internet, pero a precios algo desorbitados.
En fin, os lo cuento por si tenéis ocasión de haceros con un bote de esta crema, en caso contrario podéis seguir los pasos para elaborar este helado sustituyéndola por otro tipo de crema, ya sea de chocolate, dulce de leche o cualquier otra. Seguro que se os ocurren un par de ideas.
Y si sóis Speculoos-Adictos como yo y os apetece probar otros postres elaborados con estas galletas o esta crema, aquí os dejo unos cuantos enlaces:
- Natillas a la Vainilla con Speculoos dos Texturas
- Turrón de Chocolate, Crema de Speculoos y Speculoos
- Helado de Mantecado con Crema de Speculoos
¡Ya me contaréis cuál se convierte en vuestro favorito!
CON/SIN THERMOMIX INGREDIENTES:
- 150 gr. de Crema de Speculoos
- 100 gr. de Azúcar Glas
- 3 Huevos
- 500 ml. de Nata para montar
- 100 gr. de Galletas Speculoos
ELABORACIÓN:
- En un cazo poner a calentar la leche. Mientras en un bol agregar la crema de speculoos y cuando la leche esté caliente, incorporarla y mezclar bien. Dejar que se enfríe un poco.
- En otro bol, poner los huevos y el azúcar. Batir hasta obtener una mezcla clara y esponjosa.
- Incorporar la mezcla de crema de speculoos y leche, cuando ya no esté tan caliente, a la mezcla de los huevos.
- En el vaso de la Thermomix poner la mariposa y añadir la nata, debe
tener al menos un 35% de grasa, y debe estar bien fría. Para que monte
bien podemos añadirle una cucharada de queso de untar. Montarla a vel. 3 y 1/2, pero
sin tiempo, aunque nos llevará alrededor de 2 min. conseguirlo, pero no
es matemático. Hay que llevar cuidado para que no se convierta en
mantequilla. También se puede montar la nata con ayuda de unas varillas.
- Agregar al vaso la mezcla de huevos y crema de speculoos y mezclar, para ello programar 15 seg./Vel. 3 o mezclar con ayuda de una espátula hasta obtener una mezcla homogénea. Opcionalmente, agregar las galletas troceadas y terminar de mezclar, con ayuda de una espátula. Las galletas troceadas se pueden utilizar también para decorar.
- Verter la preparación en los moldes. Si utilizamos moldes que no
sean de silicona, engrasarlos previamente y forrarlos de papel film para
que sea más fácil extraerlo.
- Congelar. Sacarlo unos minutos antes de servir para que se ablande un poco.
Bon Appétit!