Colocar 450 gr de garbanzos en un bol con agua. Dejar los garbanzos en remojo toda la noche Cambiar el agua varias veces. Al día siguiente, mezclar los garbanzos 1 diente de ajo, 1 cucharada de tahine, 4 cucharadas de aceite de oliva, un puñado de semillas de comino (opcional), jugo de un limón, un chorro de agua de coccion de garbanzo. Procesar en un mixer hasta formar una pasta compacta. Agregar un poco de agua hasta conseguir una textura suave y sólida. Añadir más limón o ajo, a gusto. Se sirve frío. Espolvorear con pimentón y un chorrito de aceite de oliva. Se disfruta sobre pan de pita, galletas o verduras crudas (zanahoria, apio, hinojo). El tahine es una pasta hecha con semillas de sésamo tostadas y molidas, ajo, sal, jugo de limón y algo de agua fría. Se consigue en comercios árabes o tiendas gourmet. Si no consigue, quedará bien igual con los demás ingredientes.