Tiramisú 'Rosso e Nero'

Esta semana he decidido darme el capricho de preparar un postre. Dejando a un lado el régimen y la dieta que, como yo, la mayoría hemos iniciado después de los excesos de verano, me he puesto manos a la obra con un maravilloso Tiramisú, eso sí lo he adaptado un poco a mi manera quizás para darle un toque diferente pero a la vez respetando todos sus ingredientes.
Lo más delicioso del tiramisú es su historia (o leyenda), este postre tiene su origen en el norte de Italia, concretamente en el Venetto, alrededor de los años 50, y tiene la peculiaridad de que se consumía en los burdeles de la zona, ofrecido por la madame a sus clientes para que éstos recuperaran fuerzas (también a sus mujeres) diciéndoles ..anda cariño que "te tira su", en italiano literalmente "tírame-arriba". . Dicha expresión en lengua veneta significa en español tentempié, pero no como aperitivo, que es como nosotros lo entendemos, sino más bien como reconstituyente. Eso sí, al principio el tiramisú no llevaba ni queso, ni nata y por supuesto ninguna grasa que pudiera hacer decaer el ánimo de tan ansiada clientela.
Espero, con esta receta, recuperéis fuerzas como antaño y sobre todo que disfrutéis de ella.

INGREDIENTES: ( 2 o 3 Raciones )
- 250 gramos frutos rojos (fresas, frambuesas, grosellas etc.)
- 250 gramos queso mascarpone
- 2 huevos
- 3 cucharadas de azúcar
- 10 galletas de chocolate (tipo OREO)
- 1 café expreso
- Bizchochos tipo soletillas
- Ralladura de cáscara de limón
- Ron de caña
- Hojas de menta
ELABORACION:
En primer lugar prepararemos la salsa roja, para ello en un cazo o sartén pondremos 2 cucharadas de azúcar junto con las fresas y las frambuesas (reservaremos algunas para decorar), cocinaremos a fuego suave hasta el punto de caramelo y pasaremos las frutas a un colador. Aplastaremos suavemente, filtrando el contenido libre de pepitas e impurezas, hasta conseguir que vayan soltando todo su jugo y reservamos.
Ahora toca triturar las galletas de chocolate, es sencillo, pero como a mi me gusta utilizar las Oreo (por su color oscuro y su textura), separamos los dos lados de la galleta y retiramos el relleno, las ponemos en un mortero, y sin golpear, simplemente apretamos con la maza poco a poco hasta conseguir una "galleta en polvo". Poro otra parte hacemos un café bien fuerte, al que añadiremos un chorrito de Ron, y dejaremos enfriando en una taza mientras seguimos con la receta.

Para el Tiramisú cascamos los huevos, separando las claras de las yemas, batimos estas últimas con una varilla junto a una cucharada de azúcar, vamos añadiendo el queso mascarpone y la ralladura de limón, batimos todo hasta que quede bien mezclado.

Por otra parte montamos las claras a punto de nieve (hay muchos trucos para conseguir un buen resultado, como añadir una pizca de sal, o que los huevos sean muy frescos...pero lo importante es que el recipiente sea de fondo redondo, esté libre de cualquier tipo de grasa y batir con el tenedor hasta que estén ligeramente esponjosas, antes de utilizar las varillas). Agregamos las claras al bol donde tenemos la mezcla del queso y las yemas, y mezclamos todo con una lengua, despacio, suavemente, con movimientos circulares de arriba a abajo, para evitar que las claras "caigan".
Ahora toca montar el postre, ponemos el café en un plato donde iremos bañando (sin empapar demasiado) las soletillas. Colocamos el bizcocho en el fondo de la copa o vaso que vamos a utilizar a modo de base y sobre este vamos rellenando por capas: primero un poco de la crema de tiramisú, seguimos con la galleta triturada, salseamos con los frutos rojos, otra capa de crema, galleta y rematamos con otro poco de salsa de frutos rojos. Tapamos nuestro postre con film transparente e introducimos en la nevera al menos unas tres horas.

Pasado este tiempo ya tenemos nuestro espectacular postre listo para comer, sólo falta decorar con unas frambuesas, o grosellas, una ramita de menta fresca, y listo para servir...A disfrutarlo!