Si eres de los que cuelan los gazpachos para dejarlos más líquidos, si eres de los que no les gusta tirar comida y si eres de los que les gusta "reciclar sabores" esta es tu receta, ¡puro aprovechamiento!.
Aún estamos en verano, que narices, ¡algunos ni siquiera nos hemos ido de vacaciones!, aún hace calor y, por tanto, sigue siendo tiempo de gazpachos.
Y de eso va la receta de hoy, de una variación de un gazpacho o de la ida y vuelta de un gazpacho a México.
Cuentan que el arranque, típica receta roteña, toma su nombre de que parece el primer paso hacía un gazpacho, digamos que básicamente consiste en un majado de tomates, ajos y pimientos al que luego se le añade pan desmigado y se aliña. Ósea, digamos que le falta el agua para convertirse en un Gazpacho o algo muy parecido.
Por otro lado, si mezclamos aguacate, tomate, cebolleta, chile, zumo de lima.... todos podemos ver que estamos hablando de un Guacamole.
¿Y si hacemos un híbrido?
Ingredientes:
- Los de un gazpacho de un litro ¡sin pan!.
- Una Cebolleta (a ser posible morada).
- Un Aguacate
- Un chile (o unas gotas de Tabasco).
- Una lima
- Un manojo de menta o cilantro
- Sal
- AOVE
- Pan para tostas.
Elaboración:
1.- Si trituras los ingredientes de tu gazpacho en una batidora y luego los cuelas, eso es lo que queremos, todas las pieles, pulpas, etc... que no pasan por el colador o chino y están llenas de vitaminas y fibra.
2.- Pelamos y picamos un aguacate. Picamos muy fina una cebolleta y el chile. Añadimos a la mezcla anterior y removemos bien. Aplastamos un poco con ayuda de un tenedor para ir incorporando el aguacate.
3.- Añadimos, sal, AOVE y el zumo de una lima. Removemos bien.
4.- Hacemos unas tostadas (en este caso han sido directamente sobre la barbacoa, ¡impresionantes!) y untamos la mezcla. A la hora de servir incorporamos la menta o el cilantro (lo que más os guste) picados y un poco de ralladura de lima.
Así que.... ¿cómo lo llamamos?, ¿arrancamole?, ¿guacarranque?, ¿otra cosa?....