Revista Cocina
Si hay algo que me gusta de la comida árabe es el falafel (entre otras cosas, claro) muy típico de la gastronomía de estos países. No puedo resistirme cada vez que los veo, pedirme estas bolitas de garbanzo que tanto me hacen disfrutar y que quedan de maravilla acompañados de un poco de ensalada. Una forma distinta de comer legumbres, que nos pueden ayudar a completar la dieta, aportándonos los nutrientes necesarios para afrontar el día con energía, además de ser un entrante delicioso.
500 gr. de garbanzos que habremos tenido en remojo 24 horas.6 dientes de ajo.Cilantro y perejil frescos (unos 60 gr. entre los dos, mitad y mitad)½ Cebolla.2 Cucharaditas de aceite de oliva.1 Cucharadita de bicarbonato.1 Cucharadita de semillas de sésamo.2 Cucharadas de cilantro en polvo.2 Cucharadas de comino en polvo.2 Cucharaditas de chile en polvo.Sal y pimienta.Aceite para freír.
1- Lo primero que haremos será secar bien los garbanzos que habremos tenido en agua 24 horas (cuanta menos agua tengan mejor para que no se nos deshagan luego al freírlos) cambiando el agua de vez en cuando. En la picadora, colocamos los garbanzos con dos cucharaditas de aceite y los picamos durante un minuto, pero sin que queden completamente triturados, tienen que quedar a trocitos muy pequeños.2- Ponemos los garbanzos en un bol grande. Añadimos las especias (cilantro en polvo, cominos, sal pimienta, chile y bicarbonato) y mezclamos bien. En la picadora colocamos los ajos pelados, la cebolla,el perejil y el cilantro, trituramos un minuto y añadimos a la masa junto con las semillas de sésamo. Mezclamos bien y dejamos reposar una hora.3- Vamos tomando pequeñas porciones de la masa, apretándolas bien y dándoles forma, primero redondeada y después las chafaremos un poquito, que queden como hamburguesitas. Las freímos en abundante aceite caliente, primero por ambos lados para sellas y luego un poco más por cada lado hasta que queden doraditos. Servimos.
Es importante que los garbanzos queden bien secos, insisto, ya que así evitaremos que se deshagan al freírlos. Si vemos que nos cuesta manipular la masa, le podemos añadir un par de cucharadas de harina (mejor si ésta es de garbanzo)
Para servir, podemos acompañarlos de una salsa de yogur, para ello, mezclaremos un yogur blanco con un ajo rallado, sal, pimienta y un poco de hierbabuena, quedarán deliciosos con ella.
También podemos tomarlos en pan de pita acompañados de un poco de ensalada y la salsa de yogur. Sea como sea, seguro que os van a encantar.
Receta adaptada de La Cuisine de Bernard.