El mes de Enero ha traído una Degustabox de lo más original, y es que estaba dedicado al momento del desayuno. Estos son los productos que hemos descubierto en nuestra box:
- Ram: Chocolate a la taza, al más puro estilo tradicional. ¡Calentar y listo!
- Eko: Mezcla de cereales única que ayudan a disminuir el cansancio y la fatiga. ¡Energía ven a mí!
- Jordans: Cereales horneados y crujientes combinados con pasas sultanas. Ideales para el yogurt.
- Yogu+: Es un yogurt para beber en brick, seguro que a lo más pequeños les encanta.
- Atkins: Barrita de chocolate y avellanas, perfectas para reponer energía a cualquier hora.
- Chimbote: El mejor Dulce de leche que existe, o al menos eso certifica Manu el marido de Asu. Para grandes pequeños y pequeños grandes.
- Artiach: Galletas dinosaurio, por cierto otro favorito de Manu. Esta vez están cubiertas de chocolate blanco, totalmente irresistibles.
- Cuétara: De los creadores de las galletas Napolitanas, llegan los bizcochos con relleno de sabor canela y bañado en la base con cacao. Rebueno.
- Aspire: Es una bebida energética saludable y funcional, sin calorías, ni azúcares, ni grasas. Además es rica en Vitamina C, Vitamina B6, B12, B7 B3 y B5. ¡Es todo un partido!
- Trident: Lanzan un nuevo chicle que combina sabores intensos con sabores afrutados. Con interior crujiente que no te dejará indiferente.
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Entre todos los ingredientes el que he elegido a sido la leche Únicla. Esta leche es 100% natural, única tanto por sus cualidades nutricionales como por su extraordinario sabor. La alimentación y el cuidado de sus vacas en entornos tranquilos y saludables, son el secreto para obtener una leche como la de antes, con un sabor único y reconocido por International Taste Award. ¡¡Bravo por el trabajo bien hecho!!
Sabemos que esta receta es típica de la Semana Santa, pero es que al ver esta leche tan intensa no nos hemos podido resistir. Su elaboración es muy sencilla y tan sólo tendréis que tener en cuenta el tiempo de reposo para que cuaje la leche. Os recomendamos hacerlo la noche anterior para evitar esperas. La leche está infusionada con canela y naranja, pero podéis hacerlo con limón. ¡A la cocina!
Leche frita de naranja y vainilla
⌇ Preparación: 4 horas reposo + 40`
◷ Raciones: 9 unidades
⥯ Dificultad: baja
Ingredientes
- 500 ml leche
- 40 gr maicena
- 1 ramita de canela
- 100 gr de azúcar
- 1 cucharadita de vainilla en pasta (opcional)
- cáscara de 1 naranja
- 1 huevo para rebozar
- harina de trigo para rebozar
- aceite para freir
- azúcar para el rebozarado final
- canela en polvo para el rebozado final
Receta
Para comenzar poner un cazo a fuego bajo la mitad de la leche junto con la rama de canela y la piel de la naranja. Lo tendremos hasta que rompa a hervir y apagaremos el fuego. Dejaremos infusionando tapado durante unos 15 minutos. Mientras tanto en el resto de la leche, disolver la maicena hasta que quede sin ningún grumo. Esto será más fácil si la leche está fría.
Retira la piel de la naranja y la ramita de canela de la leche, cuélalo si fuese necesario. A veces las ramitas de canela dejan trocitos y esta vez no los queremos. Vuelve a poner el cazo en el fuego, añade la leche con la maicena y el azúcar. Con la ayuda de unas varillas de cocina mover todo sin parar durante los primeros minutos a fuego bajo, lo dejaremos cocinando durante unos 30 minutos. Es importante mover de vez en cuando para que no se nos pegue ni el azúcar ni la leche. Ya que si fuese así nuestra masa de leche frita empezaría a saber a quemado y sería todo un desastre. Así pues no quitéis el ojo al cazo, cuando pasen la media hora, probar la masa y comprobar que tenga buen sabor. Es decir, que la maicena se haya cocinado y no esté cruda.
Mientras tanto buscar un molde cuadrado o rectangular y engrasalo con mantequilla o aceite. En este molde pondremos nuestra masa de leche frita, la cual dejaremos reposar en la nevera bien tapada con film tocando la
superficie durante unas 4 horas mínimo. A la hora de elegir el molde tendremos que tener en cuenta si queremos una leche frita finita o gordita, a nosotras particularmente nos gusta que tenga grosor. La hemos dejado toda
la noche, para repartir un poco el trabajo repostero.
Ya cuajada la leche pasaremos al freírla. Para ello volcar la leche ya cuajada en una bandeja o plato y lo cortaremos en rectángulos o cuadrados. Ahora pasar el cuadrado por harina y luego por el huevo. freír en abundante aceite a temperatura suave, para que se nos fría bien pero sin quemar el rebozado. Repetir la operación con todos los cuadrados y dejarlos reposar en un plato con servilletas de cocina para que absorba el aceite sobrante. Para acabar
poner en un plato azúcar y canela en polvo, pasar por ahí los cuadritos de leche frita para que se queden más dulces y ricos todavía. También podéis poner azúcar glass con canela en polvo en un colador y espolvorear así nuestros cuadraditos, que ya estarán listos para comer!!
Notas:
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