Este pastel de berenjena está inspirado en la musaka, para hacerlo más lowcarb que cambiado la bechamel por la creme fraiche.
INGREDIENTES: (para 4 personas) 400 gr de salchichas (o carne picada) hierbas provenzales y canela aceite de oliva virgen extra queso rallado tipo mozzarellaCortar las berenjenas en rodajas gruesas, extender sobre una fuente, sazonar, colocar otra fuente encima y esperar 1/2 hora más o menos, para que suelten el jugo amargo que tienen.
Pasado ese tiempo coger las rodajas, para que suelten el jugo amargo, lavarlas, escurrirlas y secarlas (mejor con papel absorbente) y reservar.
Picar la cebolla y freír en una sartén mediana con el aceite y dejarla que hasta que se quede doradita. Cuando ya esté la cebolla doradita, añadirle la carne picada, y saltear todo junto unos minutos (3 ó 4) hasta que cambie de color.
Cuando este todo eso salteado, añadir el vino, los tomates (pelados, picados y sin pepitas), las hierbas y la canela.
Salpimentar, dejar cocer todo en la sartén a fuego lento, hasta que esté hecho el tomate y la cebolla, yo esta vez he usado un sofrito ya preparado.
En otra sartén, pincelarla con aceite de oliva y cuando este caliente, hacer a la plancha las berenjenas a ser posible, que no queden muy tostadas, sacar y escurrirlas (mejor en papel absorbente) para que no queden muy aceitosas y reservar.
Coger una fuente de horno, poner una capa de berenjenas y, sobre ellas una de carne picada. Repetir la operación y terminar con una capa de berenjenas.
Poner por encima la creme fraiche y cubrir con el queso rallado elegido , yo esta vez le he puesto scamorza rallada y gratinar en el horno.