Roscon de reyes

Comenzaremos preparando la masa madre para ello ponemos en un cuenco pequeño la leche tibia y desliamos la levadura en ella, en otro cuenco echamos la harina de fuerza, hacemos un huevo en el centro y añadimos la mezcla de leche y levadura. Mezclamos hasta hacer una bola y a la bola le hacemos un corte en la parte superior en forma de cruz. Buscamos un bol grande y lo llenamos con agua tibia, sumergimos la bola de masa madre en el agua, esta caerá al fondo y poco a poco según valla actuando la levadura ira subiendo a la superficie, cuando este flotando estará lista, no tardara mucho tiempo así que no la perdáis de vista si no se empapara mucho en agua.

Mientras esperamos a que la masa madre salga a la superficie iremos avanzando con la masa de nuestro roscón de reyes, para ello pondremos en un bol grande la harina de fuerza tamizada. En otro cuenco batimos los huevos y los mezclaremos con el azúcar,  la ralladura de naranja y de limón, el extracto de vainilla, la sal  y el ron, y batimos todo bien hasta que este bien mezclado. En un cuenco pequeños desliamos la levadura en la leche tibia, hacemos un hueco en el centro de la harina y echamos en el la mezcla de los huevos y la leche con la levadura, y mezclamos. Añadimos la mantequilla a temperatura ambiente, esencia de azahar y la masa madre que debe estar flotando en el agua, sino esperaremos a que este lista para agregarsela. Cuando tengamos la masa madre agregada y con ayuda de una batidora eléctrica con varillas amasadoras, amasaremos nuestra masa durante 5 minutos, cuando la tengamos lista haremos una bola y la volveremos al bol. La taparemos con un paño de algodón durante 3 horas si lo queremos elaborar en el mismo día, pero nosotros recomendamos dejarla en la nevera toda la noche, ya que cuanto mas frió mas le costara a la masa crecer y mas lento sera su crecimiento, lo que se notara en la esponjosidad de nuestro roscón de reyes.

Tras haber pasado las 3 horas o a la mañana siguiente según hallamos elegido, si hemos elegido la opción de dejarla toda la noche debemos dejar la masa a temperatura ambiente durante 1 hora antes de trabajarla, le daremos forma a nuestro roscón, para ello nos enharinamos las manos e introducimos un dedo en el centro de la masa e iremos agrandando el agujero con ayuda de las manos. Cuando lo tengamos listo lo colocaremos sobre una bandeja de horno con papel de hornear, si el agujero no nos ha quedado muy grande colocaremos un vaso previamente aceitado en el agujero para que no se cierre. Es en este momento en el que introduciremos la sorpresa por la base de nuestro roscón, volveremos a taparlo con un trapo de algodón húmedo y de nuevo dejaremos leudar otras 1 horas a temperatura ambiente.

Pasado este tiempo, precalentamos el horno a 200ºC mientras batimos el huevo, retiramos el vaso del centro y pintamos el roscón suavemente, con un pincel de silicona para no pinchar nuestro roscón de reyes con las cerdas. Preparamos también el azúcar con el que cubriremos nuestro roscón, para ello pondremos en un cuenco el azúcar y le añadiremos el agua poco a poco hasta que este apelmazado. Lo repartimos sobre la superficie de nuestro roscón, podemos decorarlo con unas frutas confitadas y unas almendras laminadas. Introduciremos en el horno entre 18 y 20 minutos a 180ºC calor arriba y abajo y 10 minutos mas a 170ºC y lo tendremos listo.

Para elaborar las naranjas confitadas se añade el agua y el azúcar en un cazo y se pone a calentar, mientras cortamos en rodajas muy finas la naranja previamente lavada si es ecológica en caso contrario lavar con ayuda de un cepillo para eliminar todas las posibles ceras que se añaden a la piel. Cogemos un cazo con la mitad de agua y ponemos a hervir, en el momento de hervir añadimos las rodajas de naranja y dejamos durante un minuto para blanquearla. Retiramos con cuidado para que estas no se rompan, escurriéndolas y las añadiremos al cazo de nuestro almíbar de azúcar y las dejaremos cocinar a fuego medio bajo durante 40 minutos aproximadamente. Una vez listas dejaremos reposar un día por completo en el mismo recipiente, al día siguiente se retiran con mucho cuidado se dejaran escurrir en una rejilla y estarán listas para usar.