Antes de que comience el calor (que aquí en Asturias suele hacerse de rogar),
hay que aprovechar para tomar esos platos de cuchara tan suculentos,
y que en la época veraniega, ya no apetecen.
que a quién le guste este tipo de platos, son exquisitos,
y no menos exquisitos, son los garbanzos con callos.
De modo que, si tenéis unos buenos callos y os sobra alguno, aquí está un plato de legumbre
para quitarse el sombrero :-)
- Poner los garbanzos a remojar la note anterior en abundante agua fría.
- Al día siguiente, eliminar el agua del remojo de los garbanzos y aclararlos con abundante agua fría.
- Poner una cazuela con el agua suficiente para que cubra los callos. Llevar a ebullición y añadir la cebolla, zanahoria, puerro, ajo, perejil y laurel.
- Cuando rompa el hervor, incorporar los garbanzos y el azafrán y dejar cocer el tiempo necesario hasta que estén tiernos (en una olla rápida, necesitarán unos 20 minutos).
- Cuando estén cocidos, sacar las hortalizas, hacer un puré con ellas e incorporar a los garbanzos.
- Remover para que se mezclen con los garbanzos y añadir la sal necesaria.
- Comprobar cómo está de caldosos, y si fuera necesario, añadir un poco de agua, o caldo de carne si se tiene.
- Dejar cocer unos 15 minutos para que se mezclen bien todos los sabores, y servir bien calientes.