Muslo de Pollo a la Plancha en su Jugo

    Y el muslo que os enseñé cómo deshuesar (aquí podéis recordarlo) lo hice de ésta forma.
    Una manera muy sana de comer. Y sano = a sabroso, sólo hay que saber cómo hacerlo para que nuestro paladar disfrute siempre de buenas comidas.
    Siempre que hacía pollo a la plancha utilizaba un poco de aceite de oliva para marcarla. Un día lo hice sin aceite, sólo con la grasa que soltaba el pollo. El resultado??..... no os lo podéis imaginar hasta que lo probéis:
    Una carne deliciosa, con un sabor especialmente sabroso, infinitamente mejor que si le añadimos aceite de oliva. Por favor, probadlo y seguro que me vais a dar la razón.
    Para ésta carne, me gusta acompañar con un poco de arroz cocido y marcado en la sartén:    Ingredientes:

• Muslo de pollo deshuesado (ver receta aquí)
• Arroz 
• Sal 

    Una vez deshuesado el pollo, podemos quitar la piel, o si os gusta... lo ponemos en la sartén con ella. Sin aceite, con la piel en la sartén, así soltará el aceite que tenga y el sabor es... impresionante.    Espolvoreamos por ambas caras con sal.
 
   He utilizado la sal de Altava que contiene diferentes hierbas, como orégano, romero, perejil, albahaca, tomillo y ajedrea.
  Esta sal es completamente pura, una sal ecológica del Parque Natural del Delta del Ebro, que ha cristalizado bajo el sol del Mediterráneo, en un paraíso Natural protegido.   Es rica en oligoelementos marinos y minerales, como el magnesio, zinc y calcio, es una mezcla de sal y hierbas de agricultura ecológica que nos permite disfrutar del aroma y gusto de la tradicional huerta Mediterránea.    Y dejamos que fría por una cara y después damos la vuelta hasta freír la otra:
    Mirad cómo  sin necesidad de aceite la carne tiene la suficiente como para freír la carne...
    Es muy importante que la carne esté bien doradita por ambas caras para que esté bien sabrosona:
   Me gusta mucho acompañar esta carne con un poco de arroz. Primero lo he hervido, colado y puesto en la sartén con una cucharada de aceite de oliva.
    Es muy importante utilizar un arroz que sea de calidad, que tenga buen sabor ya que tan solo lo vamos a hervir y freír un poco.    En éste caso he utilizado el de Dacsa.    Cuando evapore el poco agua que quede, espolvoreamos también un poco de la sal:    Y ya lo tenemos listo para comer.
    Ahhh, se me olvidaba!! si le escurrimos un limón por encima, tanto a la carne, como al arroz... ya ni os cuento!!!