Siguiendo la estela de la Pascua y el origen de la presencia de los huevos, mencionados en la entrada sobre decoración vamos a ver unas cuantas recetas con los mismos.
Un cocer huevos tiene su ciencia, y no sólo duros, además los tenemos en diferentes puntos de cocción que podremos variar según la receta (cocido, mollet o mullido, pasado por agua). No sólo influye el susudicho tiempo de cocción, también el tipo de agua, la temperatura ambiente y hasta de la presión atmosférica.
Huevos en diferentes puntos de cocción (vía Gominolas de Petróleo)
Algo muy importante en un plato tan básico y versátil es la presentación. Yo quedé fascinada al descubrir, durante una visita a Talavera de la Reina, la existencia de los platos para huevos cocidos. Perfectos para disponerlos en el centro de la mesa en exposición. Además de ser bien bonitos, es una muestra de cerámica tradicional de la que podemos presumir.
Plato de huevos de cerámica talaverana (vía Alfar Cerámica Talavera)
Podemos tomar los huevos duros sencillamente gratinados con bechamel o salsa aurora, que es una bechamel mezclada con salsa de tomate.
Huevos gratinados (vía Cuba Ahora)
Los huevos duros podemos tomarlos fríos, es ideal como canapé en fiestas, ya que los podemos dejar preparados el día anterior y sacarlos en el momento tras añadir los último toques de decoración. Podemos rellenarlos tanto de carne como de atún o salmón, al gusto de los comensales, y cubrirlos con mayonesa. A mi me encantan los huevos rellenos de atún junto a un poco de ensalada para tener preparada una cena rápida a tope de proteínas.
Huevos rellenos de atún con mayonesa (vía Javirecetas)
Huevos rellenos de carne con mayonesa y yema rallada (vía Alegría en la cocina)
También tenemos una opción calentita, que se agradece estos primeros día de primavera en los que aún nos acompaña el frío. Aquí los rellenos pueden ser también variopintos y la salsa estrella es la bechamel.
Huevos rellenos de bacon y bechamel (vía Gallina Blanca)
Una receta que en mi casa no se había hecho nunca son los huevos rellenos y rebozados. En ocasiones los acompañan de una salsa, la verdad es que me parece entre complejo y fascinante.
Huevos rellenos y rebozados (vía Mis recetas preferidas)
Finalmente una recomendación para engatusar a los niños. Los huevos duros son una comida estupenda para llevar, para tomar como tentempié y, ¡sin grasas añadidas! Podemos hacer que los huevos duros sean además monísimos y atractivos dándoles forma tras pelarlos mientras aún están calientes con unos moldes.
Huevos moldeados (vía Just Bento)
Sin nada más que añadir, os dejo con esta escena clásica del cine... ¡y dos huevos duros!