Curry vegetariano para todos los gustos

Comer vegetariano es una verdadera decisión personal, pero seamos o no vegetarianos, hay que decir que hay muchísimas recetas vegetarianas ricas y sanas que podemos comer de manera habitual o en los días especiales.

La receta que comparto hoy con vosotros es una de mis preferidas, me encanta y lo mejor, a mi familia también :-)

Este curry vegetariano es original y tiene una sabor dulce rico rico por no hablar de su color y olor. Os va a encantar.

Esta estupenda receta es del libro “101 recetas vegetarianas para solucionarte la vida” de Ana moreno, la verdad es que todos sus libros están genial.

Ingredientes

• 2 cebollas bien cortadas en cachitos.
• 2 tomates pelados y triturados.
• 2 manzanas penadas y cortadas en dados.
• 2 plátanos cortados en trozos pequeños.
• 1 bote de leche de coco o leche vegetal por ej. leche de avena.
• 3 cucharadas de curry.
• 1 bloque grande de seitán, cortado en dados.
• Aceite de oliva.

Para los que no tengamos leche de coco en casa habitualmente podemos usar alguna leche vegetal como la leche de avena o de arroz, queda igual de rico. Incluso para los que no tenéis este tipo de leches vegetales en casa y os apetece probar este estupendo planto podéis añadir un poco de leche animal o nata.

Esta receta es un planto vegetariano, pero para los que no lo sois, si no tenéis seitán a mano podéis sustituirlo por pollo aunque tengo que decir que con el seitán queda igual de rico.

Elaboración

Ponemos a calentar en una sartén aceite y cuando este caliente sofreímos el seitán. Después añadimos la cebolla. Pasado un rato cuando la cebolla este transparente añadiremos el tomate triturado.

Removemos bien para que se haga y al cabo de unos cinco minutos aproximadamente añadimos el curry, yo le echo unas dos cucharadas porque a mi familia no les gustan mucho las especias, a mi desgracias :-( , mezclamos y dejamos que se tueste.

Cuando este todo bien mezclado y tostado añadimos la leche de coco, las manzanas y el plátano.

Removemos y lo dejamos cocer unos veinte minutos más o menos, bajar el fuego para que no se os queme durante este tiempo. Os recomiendo que pongáis una tapadera para que no salte.

Cuando termine de cocer veréis que no se distingue que es que. El plato queda con un color precioso y un sabor estupendo.

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