No sé de donde saqué esta receta, pero en principio ponía que era un bizcocho, pero cuando la desmoldé y la probamos la textura era más bien de tarta o pudin, ya que no lleva ningún tipo de harina, solo el cacao, pero igualmente ha quedado muy buena de sabor.
Seguramente la repetiré pero le añadiré algún tipo de harina, para que tenga algo más de consistencia.
1 calabacín mediano unos 250 gr.)
1 plátano maduro o 100 gr. de compota de manzana
200 gr. chocolate (min 70% de cacao)
20 gr. mantequilla o aceite de coco o aceite de oliva
2 cucharadas soperas de azúcar de abedul o su equivalente en el edulcorante elegido
1 cucharadita pequeñas canela
Trocear el chocolate en un bol.
Añadir la mantequilla y ponerlos a derretir al baño maría o en el microondas, si no quieres o puedes utilizar mantequilla poner leche de vaca o vegetal.
En dos boles separar las claras de las yemas de los huevos.
Rallar el calabacín (si se quiere se puede pelar).
En el mismo bol donde están las yemas, añadir el calabacín, el plátano machacado o la compota de manzana, la canela, el cacao y mezclar todo bien.
Batir las claras a punto de nieve.
Añadir el chocolate derretido al bol de las yemas y mezclar bien.
Añadir la mitad de las claras, mezclando con movimientos envolventes para que las claras no se bajen y repetir el proceso con la otra mitad de las claras.
Verter en una bandeja. Si no es antiadherente o de silicona ponerle papel para hornear. Meter al horno precalentado durante 20 minutos a 180ºC y 10 minutos más a 160ºC.
Probar con un palillo si ya está hecho, si el palillo sale seco, si no apagar el horno y dejarlo unos minutos más para que se acabe de hacer.
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